Este próximo fin de semana, verá la luz en Madrid una nueva plataforma para la danza que encuentra su foco en dos ejes: el de funcionar como lugar de apoyo y visibilidad para creadores emergentes y el de hacerlo en una dirección donde la danza funciona como catalizador de integración. Danza con conciencia social como herramienta para la igualdad. Danza contra la discriminación. «El menosprecio hacia el considerado `diferente´ afecta a la dignidad humana y somete a maltrato, acoso y abusos», reza en las bases de este encuentro, que se celebrará los días 17 y 18 de diciembre en el Museo Centro de Arte La Neomudéjar. El Certamen Coreográfico Danza en Valores, así se llama, es una iniciativa de la también joven Asociación Primario, nacida en 2015 y conducida por Javier Mosquera de la Vega, Primi Palacios y Gerardo Rueda, que encuentra entre sus múltiples objetivos el de facilitar el acceso a la danza sin restricciones y concebir la práctica artística como una herramienta para la comunicación, la inclusión y la transformación social. «Hemos creado este certamen con el fin de dar respuesta a la demanda que existe de actividades culturales menos vinculadas al ocio y al consumo de una parte de la ciudadanía que quiere ser responsable. Y para generar un espacio que dé cobertura a creadoras y creadores emergentes de cualquier estilo de danza que lleven a cabo obras pensadas para crear conciencia y llegar a un público más amplio», declaran a este medio desde la organización. «Queremos que el certamen sirva como plataforma para alentar la creación de trabajos coreográficos que propongan una reflexión social sobre algunos temas vinculados a la actualidad como la discriminación, los patrones de género e identidad, o cualquier otro tema social».
De las 36 propuestas que se han recibido, de dentro y fuera del país, 8 han sido las seleccionadas para mostrarse el 17 y 18 de diciembre a las 12 de la mañana, abarcando diversos estilos dancísticos (danza contemporánea, flamenco, neoclásico, danza oriental, danza urbana y danza-teatro), todas con formato de dúo. «El formato dúo encierra en sí mismo muchas posibilidades de comunicación en el lenguaje del movimiento. También lo hemos escogido por una cuestión de viabilidad para los participantes a la hora de crear (sala de ensayos, movilidad de su trabajo, etc)», aclaran sus organizadores. Los premios que se otorgarán en la jornada del domingo, tras la presentación de todas las piezas, abarcan lo metálico y lo artístico: 600 y 400 euros para el primer y segundo galardón, respectivamente, y residencias y acompañamientos.
Bajo esa amplia línea de actuación con la que surge esta nueva iniciativa para la danza, se enmarcarán, durante su celebración, varias actividades paralelas que vienen a confirmar el carácter holgado alrededor del movimiento que determina este certamen. En este sentido, se podrán visitar las vídeo-instalaciones Woman on background, de Melania Olcina y Penélope is waiting, de Pedro Valiente, que permanecerán en La Neomudéjar hasta el próximo 8 de enero. Dos trabajos de dos creadores del mundo de la danza (Olcina) y el cine (Valiente) que quieren reflexionar sobre el lugar de la mujer en la sociedad, a través de su representación en el arte. «Esperamos que Danza en Valores se vaya consolidando como certamen coreográfico y sea una propuesta cultural que tenga calado social y llegue a todo tipo de público. Además de encontrar un hueco en el panorama de la danza y convertirnos en un referente, buscamos estar vinculados de forma más amplia con el mundo del arte y la cultura. Desde hace tiempo la realidad de las artes escénicas desobedece la tiranía de las etiquetas y Danza en Valores encaja dentro de este contexto», explican.
La Asociación Primario integra otros proyectos alrededor de la danza y otras artes como el festival Gatadans, el ciclo de espectáculos Danza Fiver y el proyecto colaborativo en torno a propuestas multidisciplinares Dans Off Project.